De orígenes árabes, Úbeda es una ciudad que creció con el paso del tiempo, desarrollándose más allá de su primitivo perímetro medieval hasta que en el siglo XVI conoció una etapa de prosperidad que conllevó un aumento de elementos artísticos representados principalmente por la arquitectura. En ella, se quiere mostrar la riqueza de sus poseedores a través de la profusión de decoración ornamental de sus fachadas, las dimensiones que ocupan o la posición en el plano urbano del que disponen.
Procedente de la escuela granadina de Diego de Siloé, y discípulo de éste, Andrés de Vandelvira (de posible origen flamenco por el comienzo de su apellido en Van),es el arquitecto sin el cual no se podría comprender nada de lo que estamos comentando.
Aunque en un principio estuvo encargado de la cantería de la iglesia de El Salvador, Vandelvira conseguirá tomar las riendas del proyecto cuando su maestro Siloé lo dejó. Fue quien levantó las portadas laterales y la sacristía. La planta de esta iglesia de El Salvador está distribuida de la siguiente manera: una planta de nave rectangular unida mediante un arco toral a la capilla que dispone de una forma circular. Quizás imitando a las obras maestras florentinas y romanas de principios de siglo, se intentó centrar una cúpula sobre un tambor, pero realmente eso no se consiguió por completo.
La decoración interior de El Salvador se basó en la distribución armónica de elementos arquitectónicos, que recrearan los ideales de belleza y proporción renacentistas. Pero ese efecto se logró mejor en el exterior, donde el plateresco o renacimiento inicial español, tiene un mayor protagonismo.
En la portada (inspirada en la Puerta del Perdón de la Catedral de Granada),podemos observar tres niveles escénicos.
- Inferior: con personajes procedentes de los mitos clásicos y medievales (Eros, Julio César, Hércules, Santa Isabel...), destaca el principio de Fe y Justicia dispuesto justamente sobre el arco exterior de la entrada al templo.
- Medio: escenas del Antiguo Testamento, como la Caída del Maná o La Adoración de la Serpiente de Bronce.
- Superior: con el protagonismo centrado en San Pablo y San Andrés a ambos lados de la Transfiguración (cuyo relieve posee una calidad inferior a la del resto de la portada), antecedentes a un cuerpo superior terminado en frontón triangular que representa a Dios.
En el intradós del arco de entrada Jamete, el escultor francés encargado de la cuestión escultórica, describe los cuatro elementos del Universo (aire, fuego, tierra y agua) y las principales deidades olímpicas.
En la Sacra Capilla, Andrés de Vandelvira apuesta por una bóveda vaída, que es sustentada por cariátides. En la puerta abierta en rincón que da paso a la Sacristía de la Capilla, encontramos un tema iconográfico desarrollado en el entablamento, que siguiendo la égloga IV de Virgilio, versa sobre el anuncio de la Sibila de Cumas a Augusto, príncipe romano. Ya en lo que es la Capilla, podemos observar como los nervios de la cúpula vaída se sustenta sobre atlantes y cariátides, que a su vez, son soportados por cabezas con influencias de Miguel Ángel en la expresividad de sus rostros.
BÓVEDA VAÍDA:
Bóveda esférica cortada por cuatro planos verticales y perpendiculares entre sí.
Si mañana es posible que vayamos a Úbeda, espero hacer muchas fotografías que poder colocar en este artículo.
5 comentarios:
al autor del artículo sobre santa maría de la oliva: ¿las bóvedas son bóvadas vaídas las que cubren las capillas laterales o son cañones?
gracias
(el comentario anterior es erróneo. con respecto a la iglesia del salvador: ¿son bóvedas vaías las que cubren las capillas laterales o son cañones?
gracias
Hola, Anónimo.
Estoy observando un plano de la planta de El Salvador y a simple vista, creo que las capillas laterales no están cubiertas con bóvedas vaídas, ya que es la nave principal del edificio la que emplea esa solución para su cubierta. Además, creo recordar que las capillas laterales se conforman respecto de la nave central por medio de un arco de medio punto y es posible que su cubierta se configure en cañón.
Hola. Buscando imágenes para preparar clases, he encontrado casualmente tu blog. Soy profesor de Historia del Arte, y soy de Úbeda.
Sobre la Capilla del Salvador, te confirmo que las capillas se cubren con bóvedas de cañón casetonadas.
Espero que disfrutaras de mi ciudad, a pesar de la mala experiencia de la lluvia y demás que mencionas.
Saludos
Hola, Jose Manuel.
Gracias por tu comentario y por tu aportación, aclarada queda.
En cuanto a tu ciudad, no es que me guste, me encantó. Tiene algo especial, porque tiene aroma rural y al mismo tiempo, es una ciudad con historia y fundamento. Tengo muchas fotografías del monumento en mi archivo, por si quisieras contar con ellas. Pasear por la plaza del Ayuntamiento, ver las construcciones renacentistas y otros detalles más... en fin, no podría decirte con qué quedarme. Además, tengo un buen amigo allí profesor de música.
Un saludo.
Publicar un comentario