martes, 16 de febrero de 2010

La I Guerra Mundial: los sistemas bismarckianos.

Tras su victoria rotunda sobre los franceses en 1870, el recién creado Imperio Alemán se encontraba ante un problema de futuro. Era de esperar que las condiciones impuestas por Alemania a su vecina Francia en el tratado de Francfort serían idóneas para que los franceses acumulasen desde entonces un resentimiento político, social e incluso cultural que a la larga se mostraría fatal no sólo para ambos países, sino para toda Europa. En virtud del tratado, territorios que siempre habían estado en disputa como Alsacia y Lorena quedan en manos alemanas, siendo especialmente importantes puesto que dichos territorios estaban fuertemente industrializados y poseían abundantes recursos mineros. Además, Francia debía correr con los gastos de las reparaciones de guerra y el hecho de que Alemania proclamase su soberanía en pleno corazón francés, como era el Palacio de los Espejos de Versalles, hicieron posible un fenómeno histórico que se ha conocido como "revanchismo".

Bismarck hasta entonces había ejercido una labor de canciller del káiser Guillermo I muy parecida a la de un militar sin sentimientos y hecho de acero. Sin embargo, al término de la guerra franco-prusiana, Bismarck fue consciente de que era cuestión de tiempo de que Francia intentara deshacerse de las cláusulas del tratado. Por ello, a pesar de jugar un nuevo papel de personaje político de primer orden muy dado a las ayudas diplomáticas y a resolver los problemas de manera pacífica (como su intervención y apoyo a la Conferencia de Berlín que dividiría África para evitar problemas entre las potencias europeas), Bismarck ideó un sistema de alianzas que se conocieron en Historia como "sistemas bismarckianos".

En 1879, Alemania y Austria Hungría contraen una alianza basada en su parentesco racial, a la que se sumará Italia tres años más tarde. Esta Triple Alianza tendrá como principio vertebrador que si uno de sus integrantes era atacado por otras dos potencias enemigas (no hace falta indicar que con esto se referían claramente a Francia o Rusia), el resto de los miembros de la alianza ayudarían militarmente. Moviéndose de manera astuta, Bismarck buscó asegurarse la neutralidad rusa, logrando firmar un acuerdo de "reaseguro". Llegados a este punto, es necesario aclarar quiénes eran los enemigos de los países protagonistas de la Triple Alianza. Por un lado, Alemania tenía como contrincantes a Francia (evidentemente) y al Reino Unido, con quien rivalizaba por el control de los mares y la creación de una flota poderosa. A su vez, Austria Hungría se hallaba enfrentada a Rusia por la cuestión de los Balcanes.

Francia, al percibir este juego de intereses, se movilizó. A la retirada de Bismarck, Rusia se sintió desligada del "reaseguro" y contraerá una alianza militar con Francia en 1894, con un fuerte contrasentido como esencia del pacto. Os lo explicaré. El Imperio Ruso se basaba en una monarquía hereditaria de carácter absoluta al mando de la cual se encontraba el zar, que gobernaba sus dominios con mano de hierro teniendo a la mayor parte de la población campesina en condiciones propias de tiempos medievales a fines del siglo XIX. Mientras, Francia era la cuna de la Ilustración y la muestra clara del triunfo de los ideales revolucionarios. Como dijo Groucho Marx: "estos son mis principios, si no les gusta, los puedo cambiar".

Sin embargo, faltaba un elemento para que verdaderamente la alianza francorrusa fuese efectiva: el Reino Unido. Este país se encontraba inmerso en un aislamiento pretendido, basando su poder en su prestigio imperial y su indudable fuerza naval. Aún así, era un país vulnerable, pues su carácter insular hacía necesario que se tuviera que abastecer continuamente de materias primas y bienes de producción del exterior para que sus fábricas se mantuviesen en funcionamiento. El balance de fuerzas en el continente mostraba a las claras una división en la que el Reino Unido debía tomar parte. La disyuntiva estaba servida. El Reino Unido se había enfrentado en el conflicto de Fachoda, una región al sur de Egipto, con Francia, conflicto que había agriado mucho las relaciones entre ambos países vecinos. También la Guerra de Crimea en el Mar Negro contra Rusia no mejoraba la relación con el gigante euroasiático. Pero quizás era preferible buscar arreglos a dicha situación, centrándose en neutralizar el peligro de una Alemania cada vez más potente en su industria y determinada a reforzar su flota en detrimento de los intereses británicos.

En 1904, Francia y el Reino Unido olvidan el pasado y suscriben un acuerdo de ayuda, en la que Francia reconocía el dominio británico en Egipto y los ingleses a su vez reconocían al país galo como protagonista en el norte de África. A pesar de sus desencuentros, Reino y Unido en 1907 firman un convenio. Debido al carácter de esta alianza, en la que en ningún momento se había debatido la cuestión militar y la actuación de cada uno de sus integrantes, se le conoció como Entente Cordiale.

Así las cosas finalmente, se configuraron esas dos alianzas que a la postre darían como resultado un enfrentamiento mortal como fue la I Guerra Mundial.

TRIPLE ALIANZA (Imperios Centrales): Alemania, Austria Hungría e Italia.
TRIPLE ENTENTE: Reino Unido, Francia y Rusia.

2 comentarios:

Lulamit dijo...

He encontrado este blog de casualidad y la verdad que me ha parecido genial y muy util.Gracias por colgar tanta información.Un saludo

Antonio Miguel Martín Ponce. dijo...

Muchísimas gracias por su comentario.

Confío en que en el futuro seguiré produciendo artículos de su interés.

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